
Además es un disco de lo más tranquilo, grabado en acústico, así que parece que pega mucho en una tarde como la de hoy, la del último día de vacaciones y encima con la tormenta que esta cayendo.
Que Yo La Tengo es una de las grandes bandas de la historia del indie en las dos últimas décadas es algo absolutamente innegable. Una banda de lo más talentosa, que nunca se ha estancado y que ha hecho siempre lo que le ha dado la real gana. Además en directo tienen una sonido maravilloso. Con estos precedentes se pueden permitir perfectamente hacer un disco de versiones en acústico, y además algo de lo que pocos pueden presumir, acertar de pleno y hacer un trabajo maravilloso.
No es la primera vez que lo hacen, porque hace 25 años ya sacaron Fakebook, y ahora han decidido repetir jugada, haciendo versiones de otros artistas -conocidos y completamente desconocidos-, hacer versiones de sus propias canciones y además incluir un par de temas nuevos.
El disco tiene una primera mitad, a mi juicio más inspirada, y una segunda algo más sosa. De entrada me resultan geniales las dos primeras versiones: My heart is not in it de Darlene McCrea que es de lo mejorcito del álbum, y I'm so lonesome I could cry de Hank Willimas donde tocan en versión folk un precioso tema de blues de los 50.
Entre las versiones también destaca el genial folk de Friday. I'm in love de The Cure, que eligieron como single porque la verdad es que las ha quedado maravilloso y la voz de Yo La Tengo hace crecer la canción en un sentido difícil de imaginar. Y también la final Somebody's in love con ese juego de dúo vocal tan bonito.
En cuanto a sus temas, destaca una de las nuevas Rickety, que tal vez emparente con los temas de su último disco Fade, que el año pasado me encantó, y también es notable la versión que hace de su All your secrets que ya salió en Popular songs.
En definitiva, que para este Septiembre, es un disco perfecto, tranquilo y con una calidad al alcance de muy pocos.