Siempre me pasa, empieza el año y todavía sigo descubriendo discos del año anterior. En este caso, una sorpresa muy agradable que descubrí a través de Candy Twist, la banda de Ohio All Dogs.
Este cuarteto de pop punk está en la línea de bandas como Swearin' o Radiator Hospital, aunque bien es cierto que mezcla con acierto temas más ruidosos con otros más lentos y calmados.
El LP que sacaron en Agosto del año pasado se titula Kicking every day y comienza de forma contundente con un tema como Black Hole, uno de los que más me ha gustado y donde suenan de lo más compacto con una guitarras pesadas y una voz de lo más dulzona.
A partir de esas declaración de intenciones, se van alternando los temas más punks, como That kind of girl (una canción sobresaliente) y Ophelia, con otros temas más relajados como son Your mistakes, The Garden o esa genial Skin que va de menos a más subiendo la intensidad.
Me dejo para el final, la que considero la mejor canción del álbum Sunday morning, un bonito tema de indie-pop con guitarras jangle que se sale un poco de la línea del resto del disco, pero que les ha quedado genial y que terminan cerrando con una buena dosis de guitarras también.
Un disco de lo más interesante, de los tantísimos que nos pasan desapercibidos desde el otro lado del Atlántico.
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