The I don't cares

El año pasado cuando acabó la gira de The Replacements, la mítica banda de punk de los 80, Paul Westerberg anunció que era el final definitivo del grupo (ya habían tenido una separación en 1991). Pero sus fans no han tardado mucho en estar de enhorabuena, ya que un año después ve la luz el primer disco de su nuevo proyecto The I don't cares, que está formado por el propio Westerberg y su pareja, la también cantante, Juliana Hatfield.

El nuevo álbum de The I don't cares se llama Wild Stab, y es un disco de lo más optimista . En él se explayan con las canciones de amor (se nota la pareja) y las letras y los ritmos son de lo más alegre.

Que nadie espere encontrar el workin'-class punk de su banda por aquí, muy al contrario las elaboradas canciones de indie-pop y jangle es lo que más abunda en este trabajo. Es cierto que se dan alguna licencia para retomar las guitarras en algunas canciones más power-poperas y en otras algo más garage, pero en general abunda el buen pop.

El único pero que le encuentro es que tiene demasiadas canciones, 16 temas, yo habría seleccionado un poco y lo habría dejado en 10 u 11 para que el disco fuera redondo, porque buenos temas tienen para que les haya quedado un trabajo genial. Desde el comienzo tan jangle que hacen con Back hasta el final maravilloso que es la balada de amor Hands together.

Entre medias destacan unos cuantos temazos de jangle-pop como Wear me out loud, 12 2P (el tema que ya habían adelantado del disco) o King of America, todas ellas canciones geniales con un toque perfecto entre guitarras y melodía, al estilo de otros dúos como Jenny & Johnny.

También es cierto que otros temas cogen las guitarras con más fuerza y nos dejan algunos destellos del alma punk de Westerberg. Ahí están Born for me o Need the guys, y la muy rockera Done done done donde nos recuerdan mucho al últimos álbum de The Sonics.

Un disco interesantísimo, con muy buenas canciones y un rollo de lo más optimista!!