La banda de Detroit desde luego tiene como referente los sonidos sixties de la Motown o Stax, eso sí, no pierde de vista las referencias del indie-pop y del jangle, aunque todo dirigido desde la elegancia del sonido de un piano.
A mí en los temas efervescentes y pop me han recordado a The School, de hecho con Better of me y Daydream es lo primero que he pensado, incluso en la divertida Falling away, con esa guitarra juguetona al final. Aunque es cierto que en los cortes sucesivos se ponen algo más soul y recuerdan a la música de Amy Winehouse o Adele (ese rollo de balada comercial aparece bastante en el disco, por ejemplo en Mercy o en Rope).
Incluso en Hold your hand se van más hacia el soul-funk de los setenta sin problemas, aunque les sale uno de los temas más esquivos del disco.
Si hay dos cosas que destacan y me gustan del álbum son: la voz que suena siempre profunda y elegante (nada que ver con los ataques de pasión del soul de Otis Redding, Aretha Franklin o de la voz desgarrada de Amy), el otro aspecto que me gusta es la presencia central del piano y los teclados, que en ocasiones le dan a su música un aire jazzístico muy culto que le sienta genial.
Un trabajo de lo más recomendable, aunque es de Junio de 2016 ya os digo que lo descubrí ayer, pero bueno, nunca es tarde si la dicha es buena :)
No hay comentarios:
Publicar un comentario