El pop con mayúsculas que realizan me encanta, y además tienen la enorme personalidad de la voz de Rachel Kennedy que siempre he dicho que recuerda un poco a la de Annie Lennox.
Con aquel primer disco no consiguieron mucho eco en el mundo indie, pero el año pasado acompañaron como teloneros a Luna y eso les ha dado un poco más de nombre (aunque no demasiado, ya que siguen siendo bastante desconocidos).
Ahora presentan su segundo largo, Everybody's dying to meet you, del que ya hablé un poquillo aquí cuando salió como adelanto Pull my arm, el tema con el que abren brillantemente el disco.
Algo de su sonido ha cambiado, siguen con ese pop elegante y ensoñador, pero esta vez han incluido algo de suciedad a sus guitarras haciéndolas sonar a ratos como Sonic Youth. El culpable es su guitarrista que compró por E-bay un nuevo pedal de distorsión y estaba tan contento con el juguete que se dedicó a meterlo por todas las canciones. Pues menudo acierto!!! Los temas han adquirido muchísimo empaque y contundencia y su música le viene genial.
Desde la más poperas como la citada Pull my arm, Ego Loss (me encanta el final de este tema), All at once o My only friend, una de mis preferidas, donde los guitarrazos aparecen de vez en cuando, hasta los temás más potentes donde la distorsión se abre paso sin miedo todas las canciones suenan genial. A destacar este segundo grupo de cortes porque es donde aparece su mejor versión: Tammy que es tremenda o la que para mí es la mejor del disco How do you do.
Disco sensacional, y espero que se dejen caer esta primavera por España en algún festival para poder ir a verles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario