viernes, 28 de octubre de 2016

Motorama

A veces me sorprendo a mí mismo con lo previsible que soy. La semana pasada sale el nuevo álbum de Motorama y voy corriendo a escucharlo sin pensarlo. Menos mal que los rusos de Rostov-del-Don nunca me fallan con sus trabajos, y este no iba a ser diferente.

Resultado de imagen de Motorama rostov del donEs cierto que, aunque soy un buen seguidor de los rusos, su trabajo del año pasado Poverty fue algo más irregular. Su sonido post-punk se suavizaba y la huella de bandas como Joy Division se iba alejando. Ese camino tan interesante que iniciaron llega a su culmen en este álbum Dialogues donde muestran su faceta más pop y accesible.

Creo que fue en Don't eat the yellow snow donde leí que Motorama y el resto de grupos de post-punk y noise que han salido de Rusia en los últimos años (Aerofall o Pinkshinyultrablast, por ejemplo) superan bastante a los grupos británicos que siguen haciendo refritos de post-punk sin tón ni són. Estoy absolutamente de acuerdo con su reflexión y, en especial, cuando hablamos de Motorama.

Dialogues es un trabajo interesantísimo, calmado y maduro. Los paisajes sonoros se visten de pop, al más puro estilo The Field Mice, y aunque las baterías y los bajos siguen siendo intensos las guitarras ganan peso y brillantez mientras que los teclados y sintetizadores completan un sonido obscuro que retazos de pop brillantes que enganchan a cualquier oyente.

Yo, cada vez, tengo más claro que se trata de uno de los mejores discos del año (y este año hay varias cosas que me han gustado mucho). Dos temas sobresalen: Tell me y Above the clouds. Son dos tema geniales, con mucho de pop elegante y estribillos sobresalientes, es difícil decantarse por una de las dos cuando te preguntan cuál es la mejor del disco. Yo me quedaría con la segunda que es absolutamente hipnótica.

La obscuridad post-punk no se pierde en ningún momento, aunque destaca en cortes como Hard times, Someone is missed o I see you, mientras que el pop se impone en temas como Deep que bien podría ser un tema de los españoles Lost Tapes.

Es el disco perfecto para el otoño, no podrían haber elegido mejor momento para sacarlo. Una sucesión de canciones que enganchan y relajan.

Bravo Motorama!

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