El mes pasado Elefant Records publicó el último disco de Cooper, la banda de Álex Díez y Mario Álvarez que van ya por su quinto trabajo: Tiempo, temperatura y agitación.
La verdad es que la carrera de Cooper es tan sólida y coherente que escojas el disco que escojas vas a acertar. Y este Tiempo, temperatura y agitación no es una excepción a la regla. Al contrario, es uno de los discos más completos que han hecho.
La fórmula se mantiene: exquisito power-pop de guitarras relucientes, versos y estribillos veloces y guiños al northern soul con bonitos teclados y secciones de viento. Eso nos encontramos en Provisional (el temas más punk-pop) o El último tren, el tema que abre de forma magistral el álbum. Vemos más guiños soul en Salto que es una canción que recuerda mucho a su pasado en Los Flechazos (se nota que el año pasado sacó el disco del 30 aniversario y giró tocando sus canciones). Pero especialmente se ponen soul con Dos grados bajo cero donde se acercan al funk de Curtis Mayfield.
Ya llegó el verano, Islandia o Graciela cubren la cuota de veloz power-pop con grandes melodías que tan buen resultado han dado en anteriores trabajos. La influencia de bandas como Fountains of Wayne, Red Kross o The Posies es más que patente en estos temas, pero especialmente en Infinito, el tema que han elegido como primer single, y que es un buen pelotazo, que recuerda mucho a los temas clásicos de Cooper.
Álex ha vuelto a hacer un trabajo sobresaliente, con grandes canciones y mucho trabajo detrás. Oír este trabajo es una delicia para este verano: subir el volumen y bajad las ventanillas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario