Hacía tiempo que no me cruzaba con Martha. La banda de Durham fue una de mis preferidas a mediados de la pasada década. De hecho, los conocí en 2014 con aquel maravilloso Courting Strong que tengo por casa y que aún me pongo de vez en cuando. Luego sacaron un split 7" con los americanos Radiator Hospital y entraron en un grupo de bandas británicas de punk-pop, como The Spook School, Joanna Gruesome o Trust Fund, y otras americanas como Expert Alterations, Bleached o Real Numbers que, en su día, escuché muchísimo y los pinché muy a menudo en La Yesería y en el 12&medio que me pilló en plena época pinchando por allí los viernes y los sábados. De hecho, joder, me viene a la memoria un recuerdo tonto que me pasó pinchando en un pequeño festival, La Barbacoa del Peretón. Poniendo el vinilo de Martha (Fonsi y yo éramos los únicos, junto a Lady Dilema, que pinchábamos con vinilo) se me acercaron los miembros de la banda de Vigo When Nalda Became Punk a darme la enhorabuena porque les encantaba (bueno, y porque justo antes había puesto a los Pains y el combo indie-pop se culminaba en pogo murciano a 40º al sol de mediodía -esto es, en realidad no hay pogo, nadie se mueve de debajo de las sombrillas por miedo a sudar perramente y autojoderse el outfit, pero sí que mueven levemente los pies y eso significa que la sesión está triunfando). Ya ves, qué tontería me ha venido a la cabeza.
Ahora que echo la vista para atrás, con diferencia, la que mejor ha envejecido es Joanna Gruesome. Salvo por el pequeñísimo detalle de que ya no existe más. Eso sí, sus bandas herederas Ex-Vöid y The Tubs han tomado (y mejorado) el testigo.
Y, del resto, si hay alguna que sobresalga, desde luego es Martha. Ya en su momento por su calidad, pero con el tiempo, también han conseguido perdurar y que la coherencia de su propuesta no decaiga o se pervierta. Parece fácil escribirlo así, pero tiene muchísimo mérito.
Standing where it all began. Singles and b-sides: 2012-2025 es, evidentemente, una recopilación de singles y caras b que abarcan toda su trayectoria. En ocasiones nos dejan las grabaciones originales de algunos de sus singles más famosos como 1967, I miss you, I'm lonely, que sigue siendo una de sus mejores canciones, en otras nos dejan sus primeras canciones, como Sycamore o 1978, Smiling Politely, y también continúan el viaje hasta el presente con sus últimos singles como Standing where it all began.
Por supuesto, sus melodías pop y sus guitarras punk están presentes en estas 20 canciones, así que a veces sonarán a los primeros Green Day y, a veces, a los Heavenly más twee-punk. Esa mezcla perfecta que tan bien representa 1848, Yawning Descreetly, Clatty Harriet o The Ballad of Lucy Connor (Part I).
Por destacar, creo que es interesante la selección de versiones que hacen al final, algunas ya las conocíamos (incluso la metí en el algún recopilatorio) como My Heart is a Drummer de Allo Darlin', pero otras es la primera vez que las oigo como la que hacen de bandas como The Lemonheads y su Allison's Starting to Happen.
La verdad es que me ha hecho mucha ilusión volver a escuchar los primeros temas de Martha y comprobar que siguen tan vigentes y son tan buenos. Mucha rabia me da porque nunca les he podido ver en directo (y ojalá en el futuro). Es una selección de canciones que conocíamos, y otras que se quedaron fuera de sus discos, pero que merece mucho la pena escuchar. De hecho, llevo 2 días en el gimnasio que no escucho otra cosa.