Por supuesto, soy un fan juvenil de Radiohead. En su momento, escuché mucho a la banda de Tom Yorke y Johnny Greenwood. Tampoco se me iba la olla (pese a que reconozco que eran un grupazo) y es de esos grupos a los que nunca he visto en directo. Con los años, también reconozco que el interés por sus nuevos trabajos iba en descenso (por lo menos, en mi cabeza). Por eso, durante la pandemia y los meses posteriores post-pandemia tampoco hice mucho caso al proyecto de The Smile.
Pero este Wall of Eyes tiene muchísima punta para sacar. Vale, es un álbum ecléctico y siguen experimentando con sus sonidos (algo que siempre han hecho). De entrada, no es nada comercial y poco apto para el gran público. De hecho, si se vende y tiene buena acogida es por los nombres que hay detrás del proyecto. Eso sí, lo bueno es que a estas altura a Yorke y Greenwood todo eso les da exactamente igual.
Reconozco que, pese a ser un disco muy esquivo, lo que más me gustaría sería ver estas canciones en directo, porque creo que puede ser un show de lo más interesante. Ahí escucharíamos cortes tranquilos como Teleharmonic o Bending Hectic y acabaríamos locos con el estallido de potentes guitarras del segundo.
Tendríamos también canciones de pianos, guitarras y melodías pop que funcionarían genial y que son lo más "comercial" de este trabajo como la inicial Wall of Eyes, la final You know me! o la preciosa Friend of a Friend que podría ser un tema de Whitney que se va enredando en sonidos extraños a mitad.
Desde luego, algo tiene este trabajo de The Smile que a mí me ha convencido plenamente y me parece de lo mejor que han hecho estos artistas en los últimos tiempos.
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