miércoles, 15 de mayo de 2024

El Último Vecino


Hacía tiempo que no sabía gran cosa de El Último Vecino, el proyecto synth-pop y post-punk de Gerard Alegre. Recuerdo que hace una década me pareció uno de los grupos más interesantes del panorama nacional. Sus dos primeros discos son sobresalientes. Pero, no sé por qué, sus temas de pop ochentero, los teclados, las guitarras y las letras que tiran de oscuridad, nostalgia, desamores o melancolía no fueron suficientes para hacerle triunfar. Y bien que lo merecía.

En 2022 volvió a sacar disco, Juro y Prometo, pero pasó bastante desapercibido. De hecho a mí, que me encanta, se me pasó por completo.

Eso sí, estos últimos meses parece que me reconciliado con El Último Vecino. En 2023 sacó los singles Demasiado y Matadora, unos cortes más soleados, pop y guitarreros, que me encantaron. De hecho, a las pocas semanas girando por salas estuvo en el Garage un jueves entre semana y allí que fui a verles. Un concierto que me encantó. 

Ahora, ha publicado Riqui, su nuevo elepé, con el que vino hace un par de semanas en los conciertos mañaneros del Warm Up. Yo no pude ir aunque me dijeron que estuvo genial, más allá del calorazo que hacía.

Riqui es un álbum maravilloso. He dejado pasar tiempo y lo he escuchado mucho. Porque de primeras no tiene unos cortes pop de esos que te entran a la primera. Pero conforme más lo escuchas, más canciones van emergiendo. Y es que, El Último Vecino, vuelve por sus fueros y el synth-pop oscuro es lo que más destaca en este trabajo. 

Hay canciones más oscuras donde se acercan al post-punk sintético de grupos como New Order, donde meten guitarras que recuerdan a los rusos Motorama. Eso pasa en la maravillosa Era de esperar (que abre y cierra el disco), Libreta de recuerdos, Lo que tuvo que aguantar o en, la esquiva, Lo que quise saber, donde colabora Xenia la artista de tecno-pop.

También hay hueco para sonidos más pop y new wave, algo que a El Último Vecino siempre le ha sentado genial. Eso sí, nada de ese sonido más alegre de sus últimos singles, aquí encontramos la melancolía y la nostalgia de siempre y que nos ha dejado, por ejemplo, el single Cintas, que fue de las primeras canciones que conocimos y que es una canción genial (tiene un estribillo que engancha).

Ese tono melancólico y sombrío me ha traído a la mente algunos otros proyectos nacionales bastante interesantes que juegan con el pop y los sintetizadores como Alcalá Norte, Margarita Quebrada y, sobre todo, Depresión Sonora. En este sentido, hay canciones que destacan poderosamente como el otro single, Mi chaqueta gris (menuda entrada de saxofón más bonita) o Tus oraciones (donde también colabora el canario Luz Futuro), que quizás sean los dos cortes que más me han recordado a El Último Vecino de los comienzos. Y me encanta, como me encantó hace diez años.

Riqui es un trabajo maravilloso, canciones de orfebrería para camisetas negras y noches de darle vueltas a la cabeza fumando en el balcón.


lunes, 13 de mayo de 2024

Camera Obscura

En febrero ya comenté la gran alegría que fue, para todos los que somos sus seguidores, saber que Camera Obscura vuelven a sacar disco. Y, además, para redondear la alegría nos enteramos unas semanas después de que vendrán en septiembre al VisorFest a Murcia.

La banda liderada por Tracyanne Campbell ha necesitado un tiempo para recomponerse de la pérdida de Carey Lander. Es normal y todos les apoyamos, incluso hubiéramos entendido que hubiesen querido seguir otro camino, y les hubiéramos apoyado igual. Pero han querido volver a trabajar juntos y es una pequeña maravilla que debemos agradecer.

Look to the east, look to the west es un disco muy de Camera Obscura. Indie-pop de mucha calidad en la que exploran un poco más con los sintetizadores y los teclados. Tampoco nos sorprende porque en el proyecto de Tracyanne&Danny ya lo habíamos escuchado. De hecho, esa entrada con Liberty Print sigue los derroteros más bailables que han hecho en sus últimos trabajos Belle & Sebastian.

Eso sí, también hay cortes de tranquilo indie-pop, como esas geniales Look to the east, look to the west We're going to make it in a man's world donde recuperan sus sonidos de siempre. Incluso los pianos de Only a dream y en Sleepwalking que son una maravilla.

Sin embargo, como de costumbre, lo mejor de Camera Obscura llega cuando su indie-pop se va hacia las guitarras más veloces. Eso pasa en el single de adelanto, Big Love, que es una canción tremenda y de esas que recuerdan a los primeros trabajos de Allo Darlin'. No es lo que más abunda en este trabajo, pero otras buenas muestras son DenonThe Light Nights o Pop Goes Pop.

En definitiva, ha pasado el tiempo y Camera Obscura nos siguen dejando buena muestra de su calidad como banda. Qué ganas de poder volver a verles en directo!

viernes, 10 de mayo de 2024

The Laughing Chimes

Por fin viernes! Bueno, la verdad es que ha sido una semana bastante tranquila en lo laboral, con los finales de TFG y sus defensas (el viernes que viene ya entregan) y eso lo he notado mucho.

Iba a comentar hoy el nuevo disco de Camera Obscura, pero me lo guardo para la semana que viene porque quiero seguir escuchándolo. Además, este finde tocan en Bullas Standstill, Viva Belgrado y Flyingpigmatanza y va a ser un buen bolo. Así que hoy vengo con dos trabajos (dos singles) de la banda de Ohio, The Laughing Chimes.

Ya sabéis que los hermanos Seurkamp y su banda me encantan. Creo que en el blog he compartido todos sus trabajos. Su jangle-pop con influencias de las College Radio nortemericanas de los 80 me flipa. Pero en sus dos últimos singles vienen jugando con otros sonidos más cercanos en el tiempo y menudo acierto!

Ya a finales de 2023 sacaron el single A promise to keep que lleva como b-side la oscura, Ballerina out of control. El cambio no puede ser más notable porque A promise to keep empieza a sonar con guitarras ochenteras y líneas de bajo y batería que recuerdan a los grupos pop más oscuros de los ochenta. La sombra de The Jesus & Mary Chain está ahí.

De hecho, hace bien poco, compartieron otro nuevo single, Tomorrow's 87 que sigue en esta línea más oscura e introvertida del pop. Y lo hacen genial. De hecho, el tema titular suena mucho a grupos actuales de indie-pop que juegan con sonidos más dreamy, como bien pueden ser los canadienses Alvvays. Mientras que la cara-b, The Apologist Effigy, vuelve a poner el foco en bandas como los Jesus.

Son solo dos singles, pero The Laughing Chimes igual van apuntando maneras de cara al próximo trabajo. Y este sonido les está quedando genial a sus canciones.

lunes, 6 de mayo de 2024

The Lemon Twigs

Diría que este, A dream is all we know, es el tercer álbum de los norteamericanos The Lemon Twigs que comento aquí en el blog. Y, con diferencia, el mejor hasta el momento.

Este mes pasan por España, pero no me da la vida para subir a Madrid a verles (tampoco quedan entradas desde hace tiempo). El sábado entre cervezas en el Warm Up comenté con unos amigos que ojalá girando este mes por Europa los hubieran llevado al festival (el cartel de este año era muy irregular y tiraba mucho de grupos que repiten varias veces en el mismo festival).

Y es que, The Lemon Twigs, la banda de los hermanos D'Allario, se han consagrado como grupo más o menos grande con una propuesta que revisita el pop y el rock de los 60 y 70. Algo que, por lo menos yo, no me esperaba.

Aunque siempre han tenido canciones chulas y buenos singles, mi impresión es que luego los discos perdían un poco de fuelle y se hacían algo largos. Ojo, me pasa también un poco con este, pero bastante menos que con los anteriores, porque este disco es más coherente y redondo que los previos.

Llama la atención, como leí en el blog de Don't eat the yellow snow, que la fama les llegó con el Everything harmony, del año pasado donde se centraban más en los medios tiempos pop que recordaban a Simon & Garfunkel, y que en este disco apenas encontramos nada de ese estilo, apenas en Ember days o I Should've Known right from the start, dos baladas con aires sesenteros y hippie-folk.

La influencia de los 60 es muy clara a lo largo de todo el disco. Hay cortes, como la maravillosa Sweet Vibration con sus pianos,o Peppermint Roses, que bien recuerdan a The Beatles, y otros temas, como por ejemplo, In the eyes of the girl, que bien podría estar en cualquier disco de los hermanos Wilson y sus Beach Boys.

Eso sí, a mí lo que más gusta es cuando pisan un poco el acelerador de guitarras, desde la jangle-pop Church Bells que bien recuerda a The Byrds, hasta los cortes más power-pop y rápidos: la inicial My Golden Years, que fue primer single, o If you and I are not wise, que me traen a la memoria bandas como The Cars.

Eso sí, la palma de este disco se la lleva la maravillosa How Can I love Her More? Donde las guitarras, los redobles de batería, la melodía a lo Beach Boys, los coros y los teclados se alinean creando la perfecta canción pop.

Como dije al principio, me parece el álbum más completo de The Lemon Twigs y el que seguramente le lleve a encabezar carteles de festivales a partir de ahora.

viernes, 3 de mayo de 2024

The Reds, Pinks and Purples

Sí, hoy empieza el Warm Up y eso me pone de buen rollo. Hoy toca la mayoría de cosas que me interesan: Mujeres, Johnny Marr, Los Planetas... luego ya el resto es dejarse llevar, echarse unas risas y cervezas. Vamos, lo que mola de un festival, escuchar música y estar con los amigos.

Eso sí, antes de lo festivo voy a dejar por aquí un disco de sad-pop que no pega nada con el día que voy a tener pero que es un pedazo de disco (otro más) de Glenn Donaldson y sus The Reds, Pinks and Purples. Creo que ya huelgan las presentaciones porque siempre saca 2 o 3 trabajos por año, y casi todos me gustan y los comento en el blog.

El pasado abril con Tough Records, sacó Unwishing well y aunque parece que las guitarras afiladas han perdido un poco de presencia, sigue sonando a él y ese indie-pop de guitarras acústicas, teclados y un poco de distorsión de vez en cuando. Buen ejemplo es el inicio del álbum: What's going on with ordinary people, es uno de esos cortes de pop donde la distorsión tiene presencia y crea una capa de guitarras rajando de fondo; Learning to love a band, la segunda canción, quizás sea una de las más destacadas de este trabajo, uno de esos cortes melancólicos de amable indie-pop con guitarras suaves, bonita melodía, letra triste y un teclado precioso que acompaña toda la canción.

Y, en estos dos ámbitos es donde The Reds, Pinks & Purples mejor se mueven. En algunos discos destaca más la distorsión y las guitarras afiladas, pero en este caso las mejores canciones están dentro de esa melancolía pop más tranquila. Ahí tenemos la homónima Unwishing well, las bonitas, Public Art, Nothing between the lines y Dead Stars in your eyes (con ese punteo afilado característico) o, Your worst song is your greatest hit, donde aún un poco las dos facetas con ese fondo distorsionado al final y un teclado oscuro y lejano al más puro estilo The Cure.

Es cierto que en este trabajo The Reds, Pinks and Purples dejan un poco de lado la distorsión y los punteos afilados de guitarras para centrarse en melodías más tranquilas. Aún así, Glenn Donaldson ha vuelto a crear una colección de canciones geniales. El talento no se negocia.

lunes, 29 de abril de 2024

Perro

Es semana de Warm aquí en Murcia y, aunque el cartel de este año sea un poco ni fú, ni fá, siempre hay cosas que apetecen ver y, por lo menos, ir a tomar una cerveza y ver a los colegas: Johnny Marr, Mujeres, Los Planetas tocando el Súper 8, La Paloma, Chico Blanco, Perro, Black Lips... por lo menos hay algunas cosas más que interesantes.

Una de las cosas que más me apetecen (el sábado no hay gran cosa) es ver en directo las nuevas canciones de Perro. El disco, ¿Te acuerdas?, está recién salido el pasado viernes con Sonido Muchacho y, la verdad, es que el tiempo que han dejado pasar les ha sentado especialmente bien porque el álbum está genial.

Si ya conocíamos dos canciones tremendas, Escucha pariente y Me vas a perder donde las guitarras rollo Husker Dü o Archers of Loaf son las protagonistas, el resto de cortes están a la altura. Por ejemplo, Alguien tiene que mandar o, la maravillosa, Mañaco siguen esa línea también y enlaza bien con los primeros cortes de Perro en singles brasileñas o Tiene bacalao, tiene melodía donde las melodías pop estaban bien presentes. Sinceramente creo que es en este campo donde mejor se manejan Perro.

Su mezcla de punk, noise y kraut sigue sonando potente y con personalidad. Un buen ejemplo de guitarras sucias y baterías potentes (normal que tengan esa base rítmica tan potente con dos baterías en el grupo) es Coches chungos, trompos guapos, Dramones y mazmorras, Ejercicios de fé o Alguien te mira que tienen ese aire oscuro y algo esquivo. Incluso, la más suave, Me duele España, tiene ese rollo sintético que ya habían comenzado a deslizar en sus últimos trabajos.

La verdad es que siendo de la casa he visto a Perro tantas veces que ni sabría decirlo, pero, mira han sacado nuevas canciones, están genial y sigo teniendo curiosidad por verles. Pocos grupos pueden decir eso después de tantos discos. Bravo por ellos, joder.

viernes, 26 de abril de 2024

Laughing

Entre tantos envíos de textos que estoy acabando (hoy por fin he podido enviar un informe para el Consejo de Europa que me llevaba de cabeza desde mitad de marzo) y otras cosas del trabajo (el lunes tenemos en la facultad panel de evaluación de la aneca y yo como coordinador del doble título tengo que estar sí o sí), pues la verdad es que se me escapan lanzamientos y discos que no me da la vida para poner por aquí. Por ejemplo, los últimos discos de The Reds, Pinks & Purples (que ha ido creciendo con las escuchas) o el último, y maravilloso disco, de El Último Vecino que llevo escuchando en bucle toda la mañana.

Pero hoy es viernes, así que vengo con algo más animado, jeje. Y es el lanzamiento del primer single de los canadienses Laughing. La banda va a editar su primer elepé (bueno, el primero que yo conozco, porque no sé si es su primero en realidad), Because It's true, con Meritorio Records y ya sabéis que eso es garantía de calidad.

Bruised es el primer sencillo y es un gran tema de power-pop guitarrero. De hecho, empieza sonando a Teenage Fanclub, pero hay también ecos a bandas norteamericanas como Fountains of Wayne, por ejemplo. 

Es una maravilla de canción, de esas que te levanta el ánimo un viernes después de una semana medio muerto.